En el Reino Unido a los pacientes con una enfermedad de salud mental diagnosticada se les ofrecerán kits de inicio de vapeo gracias a un ensayo clínico de £1 millón financiado por Yorkshire Cancer Research.
De acuerdo con el comunicado de la organización benéfica independiente contra el cáncer Yorkshire Cancer Research (YCR), el estudio dirigido por Elena Ratschen, profesora asociada de ciencias de la salud en la Universidad de York, y Lion Shahab, profesor de psicología de la salud en el University College de Londres, “probará si ofrecer un kit de inicio de vapeo a los pacientes que fuman como parte de su atención de rutina puede ayudar a aumentar el número de personas que dejan de fumar con éxito”. La prevalencia del tabaquismo entre las personas con una afección diagnosticada sigue siendo extremadamente alta en comparación con la población general, entre la que se percibe una disminución de las tasas de tabaquismo, sobre todo gracias a la sustitución por el vapeo.
¿Por qué es importante el proyecto?
“En Yorkshire, el 15,4% de la población es fumadora, pero en personas con enfermedades mentales comunes, como ansiedad y depresión, la tasa es del 27,3%. En personas con enfermedades mentales graves la tasa puede llegar al 42%”, dijo la doctora Ratschen. “Hasta hace muy poco, el tabaquismo ha permanecido profundamente arraigado en la cultura de la atención y el tratamiento de la salud mental, donde se aceptaba comúnmente como un mecanismo de afrontamiento para los pacientes. Ahora sabemos que fumar empeora los síntomas de la enfermedad mental e incluso puede estar relacionado con su desarrollo”, concluye.
Existe una necesidad urgente de abordar las desigualdades en salud mental relacionadas con el tabaquismo. Las personas con enfermedades mentales pierden hasta 20 años de esperanza de vida, principalmente por las consecuencias del tabaquismo y, a menudo, por el cáncer.
“Las personas con enfermedades mentales están tan motivadas para dejar de fumar como las que no las padecen. Sin embargo, dejar de fumar puede resultar difícil debido al acceso limitado al apoyo y la alta dependencia. El contacto con los profesionales de la salud presenta un ‘momento de aprendizaje’ con oportunidades para abordar el tema del tabaquismo”, agregó Shahab. “Existe una creciente evidencia de que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a los fumadores a dejar el hábito de toda la vida y que estos dispositivos pueden ser particularmente útiles para los fumadores con afecciones de salud mental comunes”.
¿Cómo se hará el estudio?
Actualmente, alrededor de 740 personas en Yorkshire que están recibiendo tratamiento ambulatorio por enfermedades mentales serán reclutadas para participar en el ensayo de cuatro años. Además de recibir apoyo estándar para dejar de fumar, se les ofrecerá un kit de inicio que incluye dispositivo de vapeo y líquido. Si el ensayo tiene éxito, la iniciativa podría ser adoptada por fideicomisos de salud mental en Yorkshire y en todo el país.
“Este estudio permitirá a las personas de Yorkshire que fuman y utilizan los servicios de salud mental participar en un programa de investigación líder en el mundo, lo que les permitirá beneficiarse de estrategias eficaces para dejar de fumar”. A esto el Dr. Ratschen agregó: “existe un historial emergente en la realización de investigaciones de relevancia internacional sobre enfoques innovadores para abordar la epidemia de tabaquismo y daños relacionados con el tabaquismo en los servicios de salud mental de Yorkshire.
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